Discoteca abandonada

     La ausencia de una historia truculenta o lúgubre no es motivo suficiente para que no se pueda realizar una experimentación psicofónica o de otra índole paranormal. Más bien, el lugar al que nos referimos en esta experiencia  se acoge a una parcela bien distinta en las fechas en las que desarrollaba sus actividades.
     Una discoteca abandonada, junto a una carretera, en mitad de la noche y de acceso dificultoso para introducirse en su seno, también puede rezumar misterio para que el grupo sienta cierta inquietud e intriga.
     Tuvimos que caminar durante un buen rato sorteando arbustos y cañizos que nos encontrábamos durante el  paseo hasta llegar a nuestro destino. Al alcanzar la que en su momento fue la entrada, pudimos darnos cuenta del deterioro con el que ya contaba ese lugar debido al paso del tiempo y demás intervenciones humanas de escasa moral.
     Una vez que recorrimos todo el terreno tanto interno como externo, pudimos observar lo que antaño sería una piscina de grandes dimensiones y que ofrecería largos ratos de diversión estival.
      Nos dimos un pequeño descanso y escogimos un lugar en el exterior para un avituallamiento. Un poco más tarde, y después de haber cenado algo, además de disfrutar de nuestras charlas apasionadas sobre la temática, volvimos al interior de la discoteca derruida para iniciar nuestras sesiones de grabaciones de audio junto con otro tipo de técnicas para intentar ser testigos de lo insólito.
     Decir que alguna estancia nos hacía sentir temor, y no precisamente por la posibilidad de encontrarnos con algún fenómeno anómalo, sino por su alto grado de decadencia  al presenciar cómo la plataforma del piso superior se encontraba literalmente hundida con el evidente peligro de que una nueva crisis  estructural  del edificio se hiciese presente.
     Lo que en su día fuera divertimento, fiesta y actividades ociosas, se tornó con el tiempo, para los que estábamos allí, en un contexto en el que predominaba el silencio, la oscuridad y la nostalgia  ambiental de lo que en una época fue aquello.
     Se obtuvieron resultados verdaderamente sorprendentes. Parecía merodear por allí una entidad femenina que, sin saber el motivo, produjo una inclusión en algunas de las grabaciones realizadas con una buena calidad auditiva; lo que nosotros, de forma jocosa, las definimos de triple "A". No obtuvimos otra clase de respuestas como podrían haber sido de tipo raps, lo que son golpes en la pared y tabiques o actividades paranormales de otra clase.
     Hasta la próxima!!!
GRUPO DAGUIAN MADRID: MISTERIOS Y OVNIS